Por Tony Caballero Vidal.-
Tal
parece que los cambios determinados por la dialéctica no son viables a la
percepción de ciertos magnates que ven, en su riqueza y poder, solo el antojo de designios que hace mucho
tiempo pasaron de moda. Ahí está el caso del
actual inquilino de la Casa Blanca DONALD TRUMP.
América
Latina fue considerada siempre como el
traspatio del imperio del norte revuelto y brutal que nos desprecia según
nuestro Apóstol José Martí. A su llegada a Cuba para incorporarse a la guerra
necesaria le expresaría en su carta inconclusa a su amigo mexicano Manuel
Mercado: “ Ya estoy todos los días en peligro de dar mi vida por mi país “---- y
puntualizaba más adelante---- “para que no se extiendan, con esa fuerza más,
los Estados Unidos, sobre nuestras tierras de América “.
Lo
demás es harto conocido, la consagración de la fruta madura y el pretexto para
intervenir en Cuba con la explosión del Maine, el Tratado de París, la
intervención, el Tratado de Reciprocidad Comercial, la Enmienda Platt y la
comparsa de gobiernos de turno bajo la égida de una democracia de pulido corte
imperialista, sirviendo a los intereses del norte, hasta aquel primero de enero
en que llegó el Comandante y mandó a parar según la expresión musical de Carlos
Puebla.
Ahora,
vuelve la avalancha de pretensiones imperiales contra los gobiernos
progresistas de América Latina. Primero, el oscuro proceso de juicio político
contra el gobierno brasileño de Dilma Roussef, con el bien premeditado objetivo de sentar en
la silla presidencial a un títere llamado TEMER, contrario por completo al pueblo de ese país
pero favorito de Washington y más aún en los días que corren, las sucias
maniobras para evitar de cualquier modo que Luis Inacio Lula Da Silva pueda
postularse para las próximas elecciones presidenciales en Brasil. El auspicio a la presencia de MACRI en
Argentina borrando los avances de corte popular alcanzados por el anterior
gobierno de Cristina Fernández y sembrando un triste y grosero neoliberalismo
basado en el despotismo y la fuerza. Creo que hasta a la expresidenta Cristina
Fernández la han tenido en planes para ponerla en la cárcel porque, simplemente,
le molesta demasiado al actual gobierno desde su
responsabilidad de Senadora. En México, la construcción de un muro fronterizo
impuesto con saña contra un país noble al que le arrancaron en su momento una
gran parte de su territorio por la
codicia del oro y de la expansión.
Los golpes bajos contra el pueblo venezolano utilizando a la
reacción interna y aplicando sanciones unilaterales contra la nación del gran
Bolívar. Ahora arremeten también con
sanciones contra Nicaragua, con salvajes
medidas de corte económico internacional a la vez que establecen un Show con el
infundado tema de agresiones acústicas a diplomáticos norteamericanos en Cuba,
algo que no han podido probar y, sin embargo, evidentemente, se maneja como
pretexto para politizar un asunto increíble y así crear dificultades en la sede
diplomática de una Cuba limpia, sencilla, democrática y muy popular, buscando un retroceso en lo obtenido hasta ahora en las
relaciones bilaterales y existiendo una embajada en La Habana, la macabra
medida de que los trámites de visas de los cubanos deben hacerlos en Colombia,
algo insólito que tiene como fin entorpecer los viajes a Estados Unidos.
En
el Septuagésimo segundo período ordinario de la Asamblea General de la ONU,
órgano internacional creado al término de la
Segunda Guerra Mundial para lograr y mantener la paz y el orden mundial,
hace muy breve tiempo, TRUMP amenazó con incendiar a Corea y más que eso, usar
su sofisticado armamento sin contemplaciones ante cualquier eventualidad.
Con
esos ruidos y saciedad de poder, Trump
se parece más a un loco que a un presidente. Ya en los días de la debacle del
huracán “ Irma “ en Puerto Rico, “ humanitariamente “ lanzó rollitos de papel sanitario a los damnificados
en esa isla, gesto calificado como una
burla a esas personas que todavía, a pesar del tiempo transcurrido, sufren hambre, necesidades y la destrucción debido al huracán,
sin recibir la rápida ayuda de la metrópoli, Estados Unidos, para un Puerto Rico
que los propios yanquis manejan a su antojo como Estado Libre Asociado, una terminología para
disfrazar el status de colonia. Un
simple vuelo en su avión presidencial lo sacó del marco de tanta miseria
puertorriqueña. Y diría desde el aire: QUE SE SALVE QUIÉN PUEDA. Ahora, la
pretendida maniobra de trasladar la embajada yanqui a Jerusalén. Después de la
votación en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) con
relación al reconocimiento de Estados Unidos a Jerusalén como capital de
Israel, el imperio yanqui manejó la reducción por más de 285 millones de
dólares de su presupuesto para el
2018-2019 al organismo internacional.
Ante
esa realidad, América Latina no puede hacer concesiones. Debemos convertirnos
en un bloque monolítico de unidad, de solidaridad y de valentía, haciendo valer
la proclama de zona de paz para América Latina y el Caribe y la cohesión a la
CELAC y al ALBA ante el envalentonamiento de un imperio que amenaza, agrede y
mata con tal de seguir llenando las arcas de los ricos sin importarle que lo
pobres y sufridos del mundo caigan
irremediablemente por un barranco. Da mucha, pero mucha pena, que a
estas alturas del siglo 21 existan magnates con tanto poder que se crean con el
don de ser unos honorables presidentes o, mejor dicho, directores de una
comparsa donde predomina el ansia de riqueza y de poder. ¡ Qué Hipocresía ¡ . Ah, y así, con esas maléficas aspiraciones de
dominar el mundo, dicen que son…. Muy
religiosos. ¡ Que Dios los guarde sumergidos en su ranciosa tranquilidad y todos alertas ¡ ,
ante las LOCAS LOCURAS DEL “ Honorable Presidente “ : DONALD TRUMP.
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