FIDEL ESTARÁ SIEMPRE ENTRE NOSOTROS.-

                                                        
                                                                           

   

                                   FIDEL ESTARÁ SIEMPRE ENTRE NOSOTROS.

                           

 Comandante en Jefe FIDEL CASTRO RUZ, líder histórico de la Revolución Cubana. Siempre vivirá en el corazón de la Patria.

  

Dicen que Fidel ha muerto. Solo me acostumbro a verlo siempre vivo.

 No puede morir quien ha sembrado tanta gloria y tanta  historia, quien ha cultivado desde la más fecunda humildad los conceptos de humanismo, de justicia y de libertad.  Defendió el valor de las ideas como armas supremas de la razón y cimentó las bases exactas que nos legó Martí de una Patria con todos y para el bien de todos.

Desde las lomas de Oriente fue  previsor de que la lucha tenaz sería  contra el imperialismo y avizoraba que el sistema hegemónico que de él se derivaba era el causante fundamental de la pobreza, la explotación y el sufrimiento de los pobres.

                                                                             

Entrada de Fidel y el Ejército Rebelde a La Habana. 8 de Enero de l959. Triunfo de la Revolución.

Yo nací con la Revolución. 16 de Julio de 1953, solo diez días antes del glorioso Asalto a los Cuarteles Moncada de Santiago de Cuba y Carlos Manuel de Céspedes de la ciudad de Bayamo respectivamente. Mi padre fue un obrero azucarero que año tras año, desde 1935 se trasladaba a la actual provincia de Holguín a laborar tres o cuatro meses de la zafra. Luego regresábamos al humilde pueblito de Céspedes, en esta provincia matancera, venía el tiempo muerto, cargado de deudas, de preocupaciones y desconsuelos.  Mis padres me llevaron con ellos años tras años hasta que cumplí exactamente 21. Ya dentro de unos meses cumpliré 64.

Gracias a la Revolución logré mi aspiración de ser locutor de radio y periodista   con la feliz trayectoria de 42 años ininterrumpidos en mi desempeño. Y fue Fidel y siempre lo será,  el ejemplo que marque la ruta a seguir bajo la égida de su hermoso Concepto de Revolución donde, a la par de cambiar todo lo que debe ser cambiado reconoce humanísticamente la condición de ser tratado y tratar a los demás como seres humanos y en el que reconoce además que Revolución  es unidad, es independencia, es luchar por nuestros sueños de justicia para Cuba y para el mundo, que es la base de nuestro patriotismo, nuestro socialismo y nuestro internacionalismo.

                                                                             

Nuestro José Martí. Apóstol de nuestra Independencia y autor intelectual del Asalto al Cuartel Moncada.

 

 

Nadie se atreverá jamás a transitar la historia del siglo XX y lo que transcurre del XXI  sin penetrar consecuentemente en la obra y en el ideario de este gran cubano, el segundo más universal de nuestra Patria, excelso discípulo de  José Martí, que enalteció a Cuba  en el espectro de la verdadera historia  que solo pueden escribir  los pueblos nobles y humildes,  como el nuestro,  que él forjó, educó, y valerosamente acompañará siempre junto al legado de  los próceres de nuestras luchas de más de cien años por la definitiva libertad y más aún en estos tiempos difíciles de peligros y de luchas, de amor y de combate.

Fidel no ha muerto ni podrá morir jamás. Vivirá eternamente y siempre será el guía supremo en nuestra indetenible marcha hacia la victoria. En cada trinchera, en cada centro de la salud, en la sonrisa de cada niño o niña, en el pensamiento de nuestros científicos, médicos, ingenieros, de nuestros campesinos y obreros,  de la gente humilde de nuestro pueblo. Y más aún, ya está allí, desde cualquier confín del universo guiándonos perpetuamente, invariable, firme. Seguro estoy de que nos contempla orgulloso desde  el corazón de la PATRIA porque, la muerte no es verdad cuando se ha cumplido bien la obra de la vida. Por eso, simplemente por eso Fidel estará siempre ENTRE NOSOTROS.